EL VIENTO CONOCE MI NOMBRE de Isabel Allende

Tenía muchas ganas de leer la última obra de Isabel Allende. Este verano estuve releyendo su primera novela: La casa de los espíritus y cuando me enteré por la Tiktoker #PatriciaFernádez que Allende había publicado un nuevo libro, tuve que ir a la librería más cercana y comprarlo. 

Esta obra entrelaza las historias de distintos personajes que, al final, se acaban conociendo por diferentes motivos en el año 2020, año de la covid-19 y momento en el que todos somos confinados. Presente y pasado acaban uniéndose. 

Conocemos así la historia de un niño judío que es enviado a Inglaterra durante la Segunda Guerra Mundial en la "Noche de los cristales rotos". Así, el niño emprende un viaje junto a su violín y la soledad. Sus amigos y compañeros durante toda su vida. 

Por otro lado, conocemos la historia de Anita Díaz, que huye de El Salvador, como en otro momento de la historia lo hizo Samuel Adler, el niño judío. En la frontera de Estados Unidos, esta niña es separada de su madre.

En las historias que se acaban entrelazando, asistimos a varios momentos conmovedores, que nos emocionan hasta el punto de hacernos reflexionar sobre el estado actual de los millones de inmigrantes que huyen de sus países por motivos similares a los que aquí se nos relatan. Nos hace reflexionar sobre el sacrificio tan grande que a veces los padres hacen para que sus hijos puedan seguir viviendo, pero sobre todo, el sacrificio que hacen para que estos tengan un futuro mejor.

Virginia Baeza, profesora de Secundaria de Lengua castellana y Literatura